domingo, 8 de noviembre de 2015

Ocho años y sigues conmigo

Han pasado 8 años y tú sigues aquí. Se diluye el dolor de la pérdida porque la vida nos trae nuevas circunstancias, nuevas oportunidades, pero tú sigues aquí, conmigo, en mi corazón.

Han pasado 8 años, papá, y el sonar de tu voz profunda se sigue reproduciendo en mi cerebro como si de una grabación de cassette se tratase.  Y sigues aquí, susurrándome consejos al oído.

Han pasado 8 años y creo verte en cada hombre con sombrero que veo, en cada hombre alto y elegante, en cada ser amable y amoroso. Y sigues aquí, inundándome con tu presencia.

Han pasado 8 años y aún así no hay un día en el que no te recuerde, en el que no te pida que sigas siendo mi guía, mi consuelo, mi esperanza.

Estás aquí, papá. Estás aqui aunque la vida te haya separado de mí, porque soy parte de ti, te imito, te admiro, te amo. Y no se puede sentir todo eso si no estuvieras aquí. Por eso sé, papá, que sigues aquí. Te querré mientras viva.

martes, 18 de agosto de 2015

Y van 48 y aquí sigo

A pocos minutos de las 12 parece increíble que a mis casi 48 años todavía sienta ese hormigueo de emoción al llegar mi cumpleaños. A pesar de ser ya permanentemente saludada como señora/usted, etc...y saber que los 50 están a la vuelta de la esquina, todavía me emociona cumplir años.
Este año lo voy a pasar en Pinilla, rodeada de amigos y familia que están en mi vida desde hace mucho, desde la adolescencia y que me hacen sentir muy querida a pesar de los pocos días que paso aquí cada año.
Toca hacer análisis. Antes los hacía en folios que andarán amarilleando por las múltiples cajas de papeles que guardo por mi casa.
Ahora, con la existencia de mi blog, rinconcito de mi alma expuesto al destripe o admiración de quien se pasa a leerlo, mis pensamientos quedan más expuestos, pero sé que la mayoría de los que se pasan a leer lo que comparto me quieren y aprenden a conocerme y a entenderme.
Si lo miro con detenimiento 48 es un número bonito. Me gusta cumplir años pares. En mí ya hay 4 niñas de 12 años, 2 chicas de 24, una mujer de 48, y muchas niñas pequeñas, adolescentes locas por vivir...La Irene de hoy es la fusión de todas esas otras Irenes y sus experiencias vitales.
La Irene de hoy es una mujer mucho más feliz, aunque tenga mucho menos. Con hijos a los que querer de corazón pero con los que no sé entenderme. Con amigas que son hermanas y hermanas que no son amigas. Con amigos que son compañeros pero con compañeros que no son amigos. Me rodeo de energía blanca, brillante, revitalizadora y me protejo de energía vampírica, ennegrecida, desmotivadora.
Soy un cúmulo de personas en una sola. Sé quién soy y sé lo que valgo. Si algo me han dado los años es la seguridad de que voy camino de ser la mejor versión de mí misma. Dudo de que algún día llegue a serlo, pero en el proceso me voy enriqueciendo.
Me he dado cuenta que tras muchas vueltas la vida me vuelve a regalar a amistades que pensé que habían quedado atrás. Tan mala no debo ser si, tras haberme equivocado, estas amistades vuelven a mi corazón. He sido una histérica, una déspota, una amargada, una desagradecida. Soy desordenada, gritona, fofa, hortera. Pero lo soy y aún así creo que me gustaría tener una amiga como yo. Se ve que vamos avanzando...
Para este año que inicio en unos minutos pido algo sobre todas las cosas: Salud para la gente que quiero. Tras la dureza de ver enfermar personas muy amadas y admiradas me he dado cuenta de que realmente puedo vivir con mucho menos. No me importa dormir en un colchón en el suelo o comer siempre de marcas blancas o sin mucha sofisticación, siempre y cuando al acostarme sienta que todo está bien: mi familia está bien, mis amigos están bien, sanos.
He aprendido a dar las gracias cada día por lo generosa que es la vida conmigo, porque siempre tengo para comer, para vestirme, tengo un trabajo que me encanta y que es un reto para mí cada día, me siento superquerida por muchísima gente ¿Es justo que me queje?
Es cierto que quisiera que mi hijo estudiase más y fuese más respetuoso, que mi hija apreciara más el esfuerzo que hacemos por ella, que mis compañeros de trabajo valorasen lo que hago, mis ideas, tener una pareja que me ame y a quien amar apasionadamente. Pero aun no teniéndolo puedo sentirme plena.
Aparco los miedos cuando se presentan, porque se presentan... Me repongo de las desilusiones que llegan...porque llegan... Me levanto cada día con ilusión, en un reseteo constante que es necesario para gozar plenamente de la lluvia, del sol, del calor, del frío, de la compañía, de la soledad, del llanto o de las risas.
Por adelantado doy las gracias a todas las personas que me deseen felicidad en este 18 de agosto. Soy feliz, sin duda. Será por tantas felicitaciones...Gracias por quien me brinda su amistad, por quien me recuerda con cariño por haberle dado clases y no ser solo una transmisora de conocimientos, sino algo más. Gracias a mi familia de sangre y de alma.

Espero poder llegar al año que viene y volver a deleitaros/agobiaros con otro rollo como el de hoy, cuando esté liquidando la década de los 40. Pero por si me quedo en el camino os digo que hoy por hoy me siento feliz y satisfecha conmigo y con mi vida, porque sois vosotros los que habéis conformado a esta señora de 48 tacos llamada Irene.

viernes, 5 de junio de 2015

Abriendo mi conciencia (Recuperando entradas que me impresionan. Junio de 2013)

Ayer, hablando con una muy sabia amiga fui consciente de muchas cosas nuevas que han ampliado mi visión de quien soy.
Mi amiga me explicó usando un ejemplo muy gráfico cual es el origen de nuestra esencia y qué significa el concepto de que "todos somos uno".
Integrar en la vida material esa evidencia hace que todo se trastoque, puesto que hay que replantear nuevas formas de relacionarse no con tus "semejantes" sino con tus "iguales", tus otros "yo", partes de un todo infinito del que todos compartimos una pequeña parte con todas las cualidades de lo general.
Manoli usó el ejemplo del mar. No sé si eso surgió de su propia cabeza o esa similitud ya existía pero debo reconocer que, de repente, me abrió los ojos, esos que siempre se abren como platos hacia el interior cuando algo me impacta.
Entrar a valorar que apenas somos un recipiente, con forma de Irene, que contiene la esencia del todo, todos sus componentes, su recuerdos, sus vivencias, sus virtudes, al igual que un tarro lleno de agual del mar conserva en su interior la esencia del gran océano, su sabor, sus nutrientes, sus componentes químicos...
Es tanto agua de mar la que permanece en movimiento sobre la mayor parte de la tierra, como la que atesoro en un antiguo bote de miel o en una botella de plástico.
Si llenásemos miles de botes de agua, el mar apenas lo notaría y seguiría siendo impresionante. Y cada uno de esos botes conservaría en su interior la esencia de todo.
De la misma manera, todos formamos parte de la misma esencia divina y somos los recipientes que contienen una parte idéntica en su integridad, de ese TODO infinito.
Por eso desde todos los sistemas de creencias se opta por orientarnos a mirar hacia adentro, mediante la oración (que realizamos en silencio), mediante la meditación o mediante la toma de "conciencia" de quienes somos.
Hace unos meses hablé de la "magia de las regresiones" al estar convencida de que mucho de los recuerdos que afloraban durante la meditación se correspondían a vivencias despertadas de vidas pasadas. NO puedo decir que ahora no crea que algo vivencié con claridad transparente, pero la charla con Manoli también me abrió una posibilidad alternativa y plausible que integrasen esos recuerdos con mi existencia actual.
Si realmente yo soy una parte idéntica a la esencia divina de la que procedo, esos recuerdos pueden ser colectivos y todos podemos, de alguna manera, "enchufarnos", mediante la meditación, a la fuente y recordar esas vivencias como propias. Es como si yo, al ser un recipiente de agua de mar, pidiera un análisis químico y descubriera que tengo componentes dentro de mí que me informan del paso del agua que me llena por otras latitudes del planeta, insertándose en sus moléculas toda la información.
Pero ese reconocimiento de mi esencia divina me abre un campo infinito de posibilidades.
De otra manera, al mirar a mi semejante (igual, en realidad, si concebimos esta nueva visión) debo ser consciente que todos provenimos de lo mismo y contenemos la misma esencia. Y que en cierta medida todo lo que en él no me gusta está, de la misma manera, en mí porque somos uno.
Y por eso en el ejercicio del perdón que algunas religiones establecen como máquinas limpiadoras de conciencia, lo que realmente conseguimos es limpiar aquella parte de nosotros que vemos reflejadas en el otro, como recordatorio constante de que lo que no me gusta de la otra persona es lo que habita en mí que debo autoperdonarme.
Ahora toca digerir todo esto. ¡No está siendo fácil despertar!

Un Viernes Santo que llora (Recordando entradas cuya relectura me impresiona. Publicado en marzo de 2013).

En estos días de vacaciones cabría darle más tiempo al trabajo interior, aprovechar que no hay que madrugar para trabajar y dedicarse a meditar, a la introspección más dedicada.
Y sin embargo no estoy haciendo nada de ello. Se me acumulan los deberes en ese tema.
Varios libros me miran de soslayo desde encima de la cómoda y me recriminan que no los abra. Fueron regalos, o comprados con mucha ansia, y sin embargo, ahora los esquivo. Sé que los mensajes que contienen me van a remover por dentro y no estoy segura de estar preparada para ese vapuleo.
También tengo deberes para llevar a cabo la biodescodificación de una parte de mi vida. Muy necesario para mí para romper lazos dañinos que me vienen adosados desde la cuna, la tarea que me han encomendada me resultará muy liberadora, pero no saco las fuerzas suficientes para emprenderla.
Son días de lejanías impuestas que hacen replantearse, una vez más, qué camino tomar. Días de cercanías dolorosas que fustigan un alma que ya no sabe dónde ni cómo esconderse. Días de luchas perdidas entre la mente y la voluntad sin saber porqué.
Hoy es Viernes Santo. El cielo llora por la muerte de un ser excepcional que nos empeñamos en matar año tras año. Y no lo deseo. Quiero que esté siempre vivo, en mi corazón, en mi ser, en mi vida.
Esta Semana Santa he lucido orgullosa en mi solapa un niño Jesús que me regalaron hace unos días. Anacronismo, lo sé. Pero si me preguntaban decía que prefería recordar a ese Jesús vivo y niño, lleno de esperanzas de un cambio positivo que a un Jesús clavado en una cruz, alabando una muerte humana que anunciaba redención. Y el ser humano no se ha redimido.
Porque en estos días he visto tantas fotos de injusticias sociales, hipocresías aceptadas, que algo dentro de mí se rebela completamente.
Nos empeñamos en parecer seres estupendos en estas celebraciones religiosas. Tanta energía malgastada en  florituras materiales, sin reconocer el verdadero mensaje que todo esto lleva.
Nos olvidamos que todo esto llevaba implícito un único mensaje, el del amor incondicional, el que pregona la  recién estrenada Era Acuario, esa en la que nos hemos metido de lleno y que cientos de síntomas físicos está acarreando a quien no vibra a su son.
Mi cabeza, una vez más, no entiende nada de lo que escribo, quizás guiada por una fuerza que está más alojada en mi pecho que en mi mente. Quiero gritar a los cuatros vientos unas verdades que siento pero que también yo soy incapaz de cumplir.
Porque toda mi vida es un caos, de principio a fin, sin orden ni concierto, porque no brota, no soy capaz de materializar la simpleza de mi interior, de ese amor sin condiciones que sé que nace en mí y se nutre de la energía de mi corazón, pero no sé expresar. Está abotargado, no puede salir. Prefiere perderse en actividades inútiles para no enfrentar que para andar hay que empezar dando un paso.
Hoy es Viernes Santo, y lo único bueno es que en breve llega la Resurrección, la que todos hemos vivido cientos de veces y hemos olvidado.
Muchas veces me pregunto que qué pasaría si, de repente, todos recordásemos TODO. Sería una auténtica locura, pero la fuerza de la sabiduría reconocida nos haría replantearnos todo lo que esta existencia física conlleva. Sabríamos que hemos sido Ángeles y Demonios muchas veces, que hemos matado injustamente y hemos sido muertos de la misma manera, que hemos amado y odiado, sido mártires y verdugos, mujeres y hombres, justos e injustos. Sabríamos que esas lecciones nos han hecho tal y como somos en este espacio temporal que llamamos presente. Y empezaríamos a darnos cuenta de que nada es como es porque sí, sino que todo tiene un sentido más allá del sentido que nuestra mente le da. Que hemos aprendido muchas lecciones antes de ser como somos y que si no queremos asimilar las enseñanzas, repetiremos curso una y otra vez y nunca avanzaremos. Volveremos a sentir esos Dejavus que nos hacen sentir que "esto ya lo he vivido antes" pero volveremos a caer en la trampa.
¿Será que es tan difícil despertar?. Somos apenas hologramas que interactuamos en una realidad que nuestras mentes crean y que podemos cambiar si lo intentamos, si ponemos toda la intención y el pensamiento. Todo podría ser mejor.
La pena es que nuestras energías se dispersan, son utilizadas por algunos para manejarnos como marionetas. Nos programan desde sillones invisibles y como muñecos bailamos el son que nos tocan.
No sé si vapuleando a nuestras conciencias seremos capaces de mirar hacia arriba y atisbar esos hilos que nos mueven y tiremos con fuerza para arrancarlos de cuajo de una vez por todas.
Creo que el proceso es único, despertar, ser conscientes y comenzar a caminar sin hilos, de ningún tipo, sin creencias impuestas, sin materialidad absoluta, sin  la conciencia atrapada en un mundo que creemos que no podemos cambiar. Solo hay que empezar a pegar codazos al vecino y hacerle ver que podemos, que solo hay que empezar a pensar para pasar a la acción.
Hoy es Viernes Santo y he escrito guiada, una vez más, por algo que no sé concretar. Se ve que el director de mi obra de teatro está hoy sembrado y ha dedidido mover los hilitos que manejan mis dedos para que me salga esta parrafada.
Que disfrutéis del día de descanso.

miércoles, 3 de junio de 2015

Robo

Menudo tema me ha sugerido hoy Camelia para que escriba: "Robo". A ver qué sale...
Lo primero que me sugiere la palabra "robo" es cuando te roban el corazón y diluyes tu voluntad a las peticiones, a los anhelos o deseos de otra persona que se convierte en dueña absoluta de algo que considerabas exclusivamente tuyo y ya no lo es...
Podemos robar o que nos roben una sonrisa cuando, aun conteniendo las emociones en situaciones vitales, alguien consigue que tus labios reaccionen involuntariamente y tus comisuras se eleven.  Aunque los aprietes para dominarlos...resulta imposible reprimir la emoción que provoca el sonreír y terminas dándote por vencido. Vuelves a perder algo que creías tuyo: el control sobre ti mismo.
Nos roban un beso cuando en el ardor de la mirada imaginas a tu lengua pasando sobre tus labios y tu pareja es capaz de leer tus pensamientos y refresca esos labios que hablan sin preguntar. Este es un robo consentido, por lo que técnicamente es un hurto.
Ya entiendo que con la elección de este tema se debían referir al "robo" material que nos rodea en esta sociedad, pero ya me conocéis y me resulta más fácil hablar desde el corazón que es mucho más subjetivo.
Pero voy a tomar el toro por los cuernos ( cuernos de los muchos cabritos que nos roban cada día) y trataré el tema desde esa perspectiva.
¿Qué es lo que nos roban esas personas que elegimos para que gestionen los dineros que les entregamos, fruto de nuestro trabajo?
Para empezar nos roban la confianza. Nos roban la esperanza, las ilusiones. Nos quitan la fe ciega que presuponíamos en el ser humano.
Cuando se descubre un caso de robo "material" asociado a la desvergüenza del político de turno,  gran parte de la población mata en su interior muchos sueños que le contaron cuando, inocente confió su voto en esos ladrones de guante blanco.
Me gusta pensar en que, antes o después, el karma devolverá a esas personas parte de lo que han hecho y pagarán cada céntimo que tomaron sin deber.
Cuando una sociedad aplaude la indecencia, la superficialidad de meterse en vidas ajenas, la ignorancia; cuando tolera el maltrato, la violencia; cuando se valora más a un futbolista que a un profesor; cuando ignora su propia historia...ha sido despojada de su esencia. Se le han robado sus orígenes.
Lo más triste es que no existe organismo al que acudir para denunciar estos robos y me resisto cada minuto a ser yo la víctima de ese tipo de latrocinios.
Hoy el tema me resonaba poéticamente en los inicios de este escrito, y me encrespaba y desolaba en estas últimas líneas. 
A veces los retos me roban la creatividad...

martes, 2 de junio de 2015

Empatizar con uno mismo

Me ves. Aparentemente serena. La voz no me tiembla. Suena fuerte, con energía. El discurso regala mensajes; el poema, melodioso, provoca sonrisas veladas.
Desde mi atalaya todo es diferente. La boca está seca. El estómago se contrae y produce murmullos callados que alteran el espíritu. Quieres oír y huir. Pero permaneces clavada en la silla sosteniendo una sonrisa que ni siquiera eres consciente de haber dibujado en tu cara.
Si miro a mi izquierda siento la energía del cariño de mis amigas. Su presencia me recarga. Sé que haga lo que haga reconocerán mi esfuerzo y eso me tranquiliza. Empatizan  conmigo, me sonríen...
Y llega mi hora.
Comienzo la lectura. Me oigo a mí misma por megafonía. No me reconozco, pero debo ser yo puesto que el discurso me suena. Casi me lo sé de memoria...
Y llegan esos fragmentos donde me equivoco ¿es eso un móvil? ¡Me cago en to lo que se menea!.¡Es un móvil sonando!
Me hago la sorda... Total...tengo a alguien importante a mi izquierda y quedaría realmente mal si suelto un improperio ahora. Mantengo el tipo junto a la señora. Sinceramente ni sé su nombre ni su cargo. Solo sé que se ha equivocado al escribir mi nombre y se lo he tenido que decir antes de que me presentara y ni siquiera yo fuese yo. Lo que me faltaba. Tuneo en aspecto y en nombre, no reconozco mi voz, ni sé qué hago mirando a más de 300 personas desde un cerro alto y lejano...
La mano tiembla. En la columna hormiguea el miedo. Suenan alarmas.
¡Colapso, colapso!
Entonces se produce algo curioso...empatizo conmigo misma. Estoy abajo y también veo a Irene en la mesa. Y me pongo en su lugar. Le infundo ánimos.
-Respira hondo- le susurro al oído- lo estás haciendo bien. No hay temor, no cabe la confusión.
Y en ese diálogo interno las palabras fluyen.
- ¡Cuantas eses me salen!- pienso mientras dejo a mi cerebro tomar las riendas- ¡si parezco de Pinilla!.
¡Vuelve al acto, inconsciente! ¿No ves que hay muchos ojos mirándote?
He terminado la prosa - descubro. Lo difícil ya pasó- me regocijo de repente- el poema es pan comido.
Y miro a Elena. Me sonríe. Me pongo en su lugar..."Van a leer un poema que me han dedicado exclusivamente a mí en un acto público. ¿Cuántas veces ocurrirá eso en mi vida?"
Vive el momento, Elena. Tú eres la responsable de mis sudores fríos al sugerir que algunos de los padres o madres escribiésemos algo para hoy. Me tocaste la vena ególatra y ahora la vena aórtica está a punto de estallar por eso...
Respiro profundamente y me relajo.
Como en el final de un parto, siento un gran alivio cuando entono el ultimo verso. Hecho está... Facio factum est.

lunes, 25 de mayo de 2015

Caminando de nuevo

La vida te da pistas sobre lo que has de hacer. Así de sencillo.

El problema es que no conocemos todos los idiomas que se necesitan para ir entendiendo esos mensajes cifrados que te va poniendo delante de los ojos.

Para empezar a comprenderlos la vida te enfrenta a situaciones didácticas. Te enseña tras un traspiés, un empujón, una caída, o un gran porrazo.

Cuando experimentas esos golpes empiezas a comprender el sentido del todo. Nada es casual sino causal.

Hoy inicio un camino marcado por el compromiso. Se me encomendó convencer a una amiga para que bajase de las nubes y desarrollase en el aquí y en el ahora todo su talento. Y para que ella lo hiciese me tuve que comprometer a hacer yo lo mismo...no dejar que pasase un día más sin enfrentarme al papel en blanco y expresar mediante palabras los sonidos de mi corazón.

Ya hace años que mi blog nació... Y he evolucionado tanto con él, a causa de él y junto a él que no puedo negar que parte de mi alma quedó grabado para siempre en ese rincón virtual.

Es un reto para mi iniciar este camino de nuevo. No sé cual será el resultado, pero me emociona pensar que hoy la vida me ha dado pistas para comenzar a andar, sin miedo, sin pausa, incansablemente.

Me gustaría que en este camino me ayudaseis dándome las pistas oportunas en los comentarios sobre temas que debería tratar desde el latir de mi corazón. Sería un bonito reto conseguir escribir bajo propuestas interesantes, con una palabra de guía o una frase hecha como punto de partida...

Hoy te toca a ti ¿Me das un tema para mañana?...

lunes, 27 de abril de 2015

14 años repletos de hormonas disparadas

Hace un año escribí una entrada en este blog cuando Riki cumplió 13 años que titulé "carta al futuro". En aquella ocasión comenzaba a vislumbrar al adolescente que poco ha poco ha ido ocupando a quien fuera mi niño chico.
Hoy, cuando las 14 primaveras son ya una realidad he de reconocer que no está siendo fácil vivir esta etapa. Pero aunque dicen que nadie vive en cabeza ajena yo he consultado a otros progenitores y he decidido confiar y no desesperar.
Así que, simplificando, voy a desearle a mi hijo Ricardo un feliz cumpleaños, una feliz adolescencia y grandes dosis de paciencia para aguantar a su madre. Te quiero.

martes, 6 de enero de 2015

La carta que le dejaron los Reyes Magos

Querido niño/hombre:
Como este año no has creído en nosotros y ni siquiera nos has escrito una carta, hemos decidido escribírtela nosotros a ti.
Durante este año que ha terminado has estado disfrutando de muchos de los regalos que te trajimos el año pasado y no has sacado el provecho de ellos que nosotros esperábamos.Bueno sí, solo de lo material has abusado, ignorando todo lo demás que tenías ante tus ojos y no supiste ver.
Por eso este año hemos decidido escribirte unas instrucciones con todo lo inmaterial que te traemos para que seas capaz de verlo con tu corazón y empieces a valorarlo ya que, en caso contrario, lo irás perdiendo y será entonces cuando empieces a apreciar esos regalos.
Te hemos regalado unos padres que te quieren, que son imperfectos, pero al adquirirlos para ti nos dijeron que eran del  modelo "humanos" y que fallaban con frecuencia, aunque se reseteaban continuamente con la función "autoaprendizaje".
Esos padres llevan cumpliendo contigo lo mejor que pueden desde antes de que tú tuvieras conciencia de que estaban. Durante este año gozarán de un nuevo paquete de Software denominado "Paciencia" para que puedan sobrellevar los cambios que tú estás experimentando tras tu actualización "Adolescencia".
También te hemos regalado la oportunidad de aprender cosas nuevas y para ello te hemos concedido un buen colegio, con buenos profesores que se interesan por ti. Tienes suerte de haber recibido este regalo, ya que son unidades limitadas y hay millones de niños a los que no les hemos podido dar este regalo.
Otro regalo que llevas recibiendo desde siempre y que hasta ahora nunca has prestado atención es la salud de hierro de la que disfrutas . Tras algunos problemas en las actualizaciones de los años 2008 al 2012, en los que el proceso de crecimiento te produjo dolores, las versiones posteriores te han permitido practicar deportes sin más dolor que el propio del ejercicio.
Queremos que disfrutes muchos años más de este regalo.
A pesasr de que el regalo de tener un hogar no es apreciado por ti, queremos decirte que eres un privilegiado teniendo un lugar que te cobije y una cama donde dormir. Desgraciadamente también son unidades limitadas y no podremos concedérselo a muchos niños que durante este año perderán el techo donde habitan y serán separados de sus seres queridos para ser alojados en centros de acogida.
Tristemente nuestra magia es limitada y no podemos conceder todos los deseos que se nos piden.
Sin embargo para este año te vamos a conceder alimento para todos los días, con al menos tres comidas sanas y nutritivas para que sigas siendo un chico sano. Te vamos a conceder relacionarte con compañeros, hacer deporte, amar y ser amado. Vas a disfrutar de paisajes nuevos y de libertad para reír, soñar, expresarte, llorar, besar, jugar, cantar, leer, estudiar...
Para disfrutar de todos estos regalos solo te pedimos lo siguiente:
- Valora los regalos que te concedemos.
- Aprecia a las personas que hemos puesto en tu vida para que te amen y cuiden de ti.
- Respeta a los profesores que harán de ti un hombre de provecho.
- Alimenta tu inteligencia aprovechando las oportunidades que la vida te da.
- Desarrolla tus capacidades físicas e intelectuales porque tienes muchísimos paquetes se Software sin utilizar y necesitan ser ejecutados.
- Ama, por encima de todo, a quien te rodea, aunque sean imperfectos y acéptalos tal y como ellos te aman y aceptan.
Estos son nuestros regalos. No los desperdicies porque con el tiempo verás que son los realmente importantes.

Firmado: Melchor, Gaspar y Baltasar.

jueves, 1 de enero de 2015

Año nueva...vida...VIVO

Creo que es el primer año que me decido a escribir el día en que se estrena. Andaba frente al ordenador, tratando de organizar carpetas con videos y libros digitales y encontré algunos que siguen pendientes de leer.
Y entonces he recordado que hace años empecé una novela...y la he buscado para leer lo que yo misma escribí. Pero no se abría. Entre tanto he abierto blogger,..y aquí estoy, frente a un teclado y con una cabeza vacía en principio, pero siempre llena de cosas por escribir.
Y no me queda otra que recapitular sobre el año que acaba de pasar, un año par que estaba lleno de posibilidades y que fue transformador para muchas de las personas que pasaron por mi vida.
Ha sido un año de experiencias traumáticas, muertes de personas jóvenes, enfermedades de personas a las que quiero, encuentro con personas fugaces que como vinieron se fueron, reencuentros de despedida vital, reuniones de amigos y amigas del alma que aunque pasaron poco tiempo, siempre andan ahí, en mi corazón...momentos de soledad que me sirvieron para conocerme más a mí misma, aprendizajes sobre mis hijos, que son, han sido y serán, maestros para mi paciencia.
En definitiva ha sido un año pleno en muchos sentidos aunque siempre queda una sensación de vacío, de algo que se quedó sin hacer...porque como humanos nunca estamos satisfechos.
Para este año quiero desearme mucho más amor por mí misma. Espero conocer a algún nuevo miembro de mi familia y para ello deseo que sueños de personas queridas se hagan realidad. Quiero seguir disfrutando de mi madre y que esta abra mucho más su corazón a mí, desvelando quien es de verdad. Quiero aprender a comprender a mis hijos, o al menos aprender a llenarme de mucha paciencia y amor para no hacerme el harakiri si tratan de sacarme de mis casillas (en ese curso todavía no he pasado de la presentación :(  )
Son muchas las cosas que quiero lograr este año. Amar a pesar de las adversidades, perdonar a pesar de la maldad y el desprecio hacia mi persona, comprender a los que no me comprenden a mí porque no me conocen y tienen una imagen distorsionada por sus egos. Quiero que no me preocupen tonterías y ocuparme de los que sí me quieren incondicionalmente. Quiero decirle mucho más a mis amigos y amigas lo que los quiero y la necesidad que tengo de sentir también su amor hacia mí.
Este 2015 está lleno de segundos preciosos que nunca sabemos si serán los últimos y por ello no cabe desperdiciarlos en tonterías. Porque está dentro de lo posible que pierda a seres queridos, o que sea yo la que me vaya y deje a quien me quiere sin mi persona. Porque lo único que está claro es que somos finitos en este cuerpo material y que, si bien nuestra esencia seguirá inmortal, no sabemos cuánto nos durará esta carcasa en la que hemos encarnado para vivir todas nuestras experiencias vitales.
Por ello no merece la pena tener rencor, ni odio, ni hacer el mal, ni callar las palabras que son necesario que surjan, ni dejar de abrazar o amar a quien participa de tu vida, en el trabajo, en la familia, en LA VIDA.
Sé que suena todo muy utópico, pero quiero desearme a mí misma conseguir todos esos objetivos para sentirme feliz conmigo misma. Evidentemente cada día me toparé con caras amargas, enemigos de mi energía que tratarán de hacerme sentir infeliz...pero estoy preparada para VIVIR en letras mayúsculas, porque solo luchando con el amor se consigue erradicar esas fuerzas del resentimiento, el rencor, o el desprecio. Eso no va ya conmigo. No va. Lo siento para el que quiera seguir pretendiendo eso de mí. Ya tengo años suficientes para haber aprendido la lección y no voy a permitir que mi cuerpo enferme con rencores enfermizos, odios enconados o ataques dialécticos.
SOY FELIZ, HOY, PRESENTE. El que quiera que se suba a mi carro. El que no, ahí te quedas.
FELIZ AÑO 2015 a todo el que llegó hasta aquí.