El billete arrugado

Hoy he recibido un email que me ha dejado perpleja. Viene de parte de alguien que comparte gran parte de su ADN conmigo, pero a la que no me parezco en nada, afortunadamente. Este email venía cargado de malas intenciones, insultos, mentiras y demás barbaridades que uno no puede ni imaginar, si no lo lee con detenimiento.
Y yo me pregunto ¿porqué?. ¿Se puede guardar un rencor desde la infancia que lleve a los seres humanos a vejar de esa manera a sus semejantes con la convicción de que se está actuando bien? Yo no lo entiendo, de verdad, por mucho que lo intente.
Realmente en esas palabras no había absolutamente nada constructivo, nada de lo que yo pudiera extraer una enseñanza moralizadora que me hiciese deponer una "actitud negativa" que no reconozco que tenga.
Claro...es que estoy loca. Es lo más fácil. Si alguien me lo dice, acompañándolo de insultos y mentiras, yo, que soy tonta y me lo creo todo, pues lo acepto como la verdad suprema, y lo reconozco, loca como una regadera, e histérica, alucinada y demás calificativos denigrantes. A lo mejor como también ellos me leen obtienen una prueba más de que lo he reconocido y así pueden conseguir lo que buscan.
Pero bueno. Como he dicho muchas veces no hay nada mejor que sentirse uno bien consigo mismo.

Yo no voy de víctima, como también se afirma en esa joya de email, pero lo que sí está claro es que no me voy a dejar pisotear por nadie.
También he recibido un email de una amiga que sí que es constructivo. En él viene a contar que una amiga le ofrece un billete de 500 euros a su amigo que está deprimido. Éste le dice que sí lo quiere. Pero ella coge el billete y lo arruga haciéndolo una bola. Y le vuelve a preguntar si lo sigue queriendo. El amigo le dice que claro. Entonces ella lo coge de nuevo y lo pisotea, lo arrastra por el suelo y se lo vuelve a ofrecer. El amigo, extrañado lo vuelve a coger y le pregunta que porqué lo hace. Ella le contesta que aunque nos pisoteen o arrastren por los suelos, aunque traten de machacarnos, seguimos teniendo el mismo valor, igual que ese billete.
Y es así como me siento, valiosa. Y por mucha mierda que traten de poner encima de mí con mentiras, falsedades, distorsiones o manipulaciones, seguiré siendo igual de valiosa, pese a quien le pese. Y por eso le digo a la personita que me envió este email que yo no fabrico un mundo paralelo. La verdad solo tiene una cara, como dije ya hace un año cuando mentías descaradamente ante un juez, y de nada vale que te inventes tú una realidad paralela porque yo sí tengo claro quien soy y no me parezco en nada al ser que pintas. Y con saberlo yo y las personas que me importan tengo más que suficiente.