sábado, 4 de agosto de 2012

Presente = Regalo

En estos días he vuelto a encontrar muchas oportunidades de darle Reiki a personas a las que sentí que podía aliviar en algunos temas.
Me he visto rodeada de causalidades motivadas por impulsos que me han llevado al lugar justo en el momento exacto. Eso significa que todo se está moviendo con gran velocidad y que los cambios se precipitan en la vida de muchas personas a las que quiero en distinto grado.
Y una vez más me maravillo de los milagros que esa energía que nos rodea es capaz de realizar.
El reiki es energía de amor, puro y duro y el amor es capaz de transformarlo todo. El reiki ayuda a liberar esos bloqueos emocionales que no nos permiten avanzar. El reiki nos sana emocional y físicamente y no me cansaré de recomendárselo a todas esas personas que se empeñan en hacerse daños a sí mismas por mantener situaciones malsanas que la enferman hasta punto en que sus cuerpos dejan de protestar.
Y es una pena que sea la enfermedad las que las haga reflexionar. Cuando el dolor del cuerpo paraliza es cuando el alma comienza a reclamar el lugar que debería tener siempre. Es cuando empezamos a escuchar con otros oídos y reflexionamos sobre todo aquello de nuestra vida que está mal y nos ha llevado a esta situación. ¿Estás enfermo? ¿Tu cuerpo se queja o reacciona agresivamente a tu actitud? ¿Necesitas de pastillas para dormir, para el dolor, para tranquilizarte, para estar despierto? ¿Cómo no te das cuenta de que debes pararte de una vez? ¡Párate!. Analiza tu vida desde lo más insignificante. ¿Es esta la vida que quieres? ¿Realmente crees que no puedes cambiarla porque todo a tu alrededor te obliga a seguir manteniendo una fachada que te lleva irremediablemente a la infelicidad?.
Me gusta comparar el universo con el Telepizza y suelo explicar la "Ley de la Atracción" que tan bien se explica en el libro "El Secreto" con este popular restaurante italiano.
Cuando nosotros llamamos a la pizzería para pedir una pizza con unos ingredientes determinados, estamos casi seguros de que nos llegará exactamente la pizza que hemos solicitado.
Con nuestra mente nosotros "llamamos" a nuestro proveedor natural de sueños. Le solicitamos lo que queremos y el Universo, o Dios, o providencia, o suerte, o como queramos llamarlo, tiene a bien darnos todo lo que le pedimos.
Por eso hay que ser muy escrupuloso con las palabras, porque si pedimos continuamente algo que no queremos, lo estamos atrayendo irremediablemente a nosotros, porque el Universo capta tu vibración, tu mensaje, y trata de hacértelo llegar.




« Es que voy a suspender, voy a suspender... »
— ¡Marchando una ración de suspenso para el niño de Eso que lo ha solicitado

« Es que voy perder el trabajo, me van a echar... »

— ¡ Marchando una de desempleo para el caballero!




Lo mismo lo podemos aplicar a un "voy a llegar tarde, me trasladan muy lejos, me quitan el piso, me van a dejar, me voy a poner malo, me va a dar una crisis", y cientos de etcéteras. No podemos quejarnos de que lo tengamos si estamos empeñados en atraerlo a nosotros.

Así que lo mejor que podemos hacer es ser positivos siempre. Agradecer todo lo bueno que tenemos a nuestro alrededor, vivir el presente como lo que es, un regalo y  lo único verdadero que tenemos. Preocuparse por el futuro es sufrir por adelantado por algo que todavía no ha pasado y que es muy probable que nunca pase. Cuando llegue ese "problema" lo enfrentaré desde ese presente y así no adultero la felicidad de la que puedo disfrutar ahora mismo.
Y bueno, quería hablar de Reiki y finalmente he hablado de muchas cosas más. Para mi Reiki es una puerta hacia el interior, hacia ese estado conciencial en el que quiero vivir. Para valorar todo lo bueno que tengo a mi alrededor por muy poco que dure, porque no merece la pena enfadarse, porque preocuparse no tiene sentido, porque ser amable agranda el espacio en el corazón, porque trabajar amando el trabajo que nos alimenta debe ser la pauta general y sobre todo porque doy y daré siempre las gracias por todas las experiencias de mi vida, hasta por las que en su momento califiqué de malas. Soy quien soy por todo ello.
Así que tú, que me lees, me aprecies o me odies, me conozcas o no, párate a pensar ¿Qué le estás pidiendo a la vida para ti? ¿Disfrutas de tu presente dando las gracias por todo lo que tienes? ¿Sonríes más que riñes o te enojas?...¡Vive feliz y deja vivir! Todos nos merecemos lo mejor y solo tenemos que pensar en que somos merecedores de ello.
Me encanta este presente, el que me ha brindado la oportunidad de escribir esta parrafada del tirón...



1 comentario:

  1. Como siempre, me encanta todo lo que escribes, Irenuki!!.besinos y gracias por animarme con el Reiki.

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